Dormitorio ecléctico: Mesilla de noche y cómoda.
Esta semana cambiamos de estilo y de temática. Después de ver varios posts centrados en el estilo «country chic», hoy toca hablar de hablar de las piezas que realicé para un dormitorio de estilo ecléctico. El estilo ecléctico se caracteriza por la mezcla de diferentes estilos de forma armoniosa. En este caso, el objetivo era encajar unos muebles de estilo clásico, dentro de un dormitorio de aires nórdicos, con toques setenteros.
Este era el estado original de las piezas. Sus dueños las encontrados en una tienda de segunda mano, donde esperaban pacientes una segunda oportunidad. Se trataba de un juego de dos mesillas de noche con patas estilo Reina Ana y copete tallado, y una cómoda también con patas Reina Ana con unas líneas muy inglesas.
Eran piezas eminentemente clásicas, pero que tras una sesión de magia de Mutatis Mutandis se transformarían en el mobiliario ideal para un dormitorio ecléctico y juvenil.
La fuente de inspiración en la transformación de estas piezas fue el estampado de la ropa de cama de los propietarios, de estilo setentero. A partir de él se eligió el color de las piezas.
El color azul verdoso de la colcha, junto a los detalles en celeste, blanco, fucsia, amarillo… complementan y, a la vez, contrastas con el azul agua elegido para las piezas. La vivacidad de estos colores, especialmente el fucsia y el amarillo, hacen que la pieza destaque, y se resalten sus formas. Este azul agua ya lo utilizamos en otras ocasiones, se trata del azul atolón de Luxens para Leroy Merlín.
La técnica elegida fue el esmalte, por lo que se siguieron los pasos habituales ya explicados en otras entradas de este blog:
- Lijar la superficie para eliminar el brillo del barniz.
- Limpiar bien la superficie.
- Sellar la madera con una capa de imprimación.
- Aplicar dos capas de esmalte siguiendo los tiempos de secado recomendados por el fabricante.
- Dar una capa protectora de cera.
Como podéis observar, el copete ha sido retirado, remarcando las líneas rectas de la mesilla de noche y dándole un toque más moderno. Sin embargo, el mismo copete ha sido aprovechado como elemento decorativo y como anclaje visual del mueble, colocándolo en la repisa de obra que funciona como cabecero del dormitorio.
El proceso seguido para la cómoda fue exactamente el mismo. Como puede verse en las fotografías, los tiradores también se esmaltaron, unificándolos visualmente con el conjunto y restando el carácter clasicista de las piezas.
Los accesorios de estilo «pop» son el contrapunto perfecto de estos muebles, imprimiéndoles inmediatamente un aire joven y moderno.
Este dormitorio es un ejemplo claro de que la mezcla de estilos en decoración es posible y que, además, funciona a la perfección. Mezclar piezas de diferentes estilos y épocas no debe de asustarnos, aunque debe de hacerse en la proporción adecuada y jugando con el color y los accesorios como elementos unificadores.
Espero que os haya resultado interesante el post de hoy. ¡Nos vemos la próxima semana!
Mi nombre es Tania Tapia, aunque soy historiadora del arte y profesora de idiomas, disfruto transformando espacios y viejos muebles en piezas de decoración actual. Si estás buscando ideas DIY para transformar tu hogar, o necesitas que alguien lo haga por ti, creo que este blog te resultará interesante.
